"Vacía tu mente, no tengas forma ni figura, como el agua. Si pones agua en una taza, se convierte en la taza. Si la pones en una botella, se convierte en la botella. Si la pones en una tetera, se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede golpear. Sé agua, mi amigo". Con filosofía simple y aplicable, Bruce Lee dejó un legado que nos enseñaba a afrontar con polivalencia la existencia. Sirve en cualquier escenario. En el fútbol, como la vida misma, también.